Santa Fe – Rosario.
Dejarse caer y subir a la escena.
Pasaje al acto y Acting out

Una foto de contenido sexual pasa a las redes sociales. La imagen pertenece a un púber, quien no puede evitar su viralización. La situación lo supera, se ve abrumado, perdido. En la soledad de su extravío, a los pocos días se suicida.
Una adolescente de 14 años vende una foto de sus pies a cambio de dinero. Luego, las demandas de otras partes del cuerpo y los montos ofrecidos a cambio de ellas, se incrementan. Se baja de las redes en un intento de desaparición del asunto, pero el asedio continúa por teléfono. Se abre una espiral de problemas, la adolescente queda envuelta en un sin fin de aristas, causas y consecuencias, que la exceden. Repentinamente, mientras los padres la creen en la escuela, ella ha salido con rumbo desconocido.
El cambio de estatuto de un gesto y una parte del cuerpo, hace que las cosas se salgan de control. El pasaje anticipado e involuntario del fuero íntimo al público, asumen una dimensión masiva e intrusiva. Los espejismos de las redes sociales, actualizan el vacío estructural que se responde por la precipitación de la acción. Se presenta aquí, la solución definitiva del dejarse caer del acto suicida del 1er caso o el montaje de la escena del acting out de la 2da viñeta.
En la sala de emergencias un practicante presencia gritos, parálisis, corridas, violencia, excitación psicomotriz, palabras delirantes. Nos preguntamos: ¿Cuándo la urgencia se transforma en urgencia subjetiva? Podríamos decir que, constituye un campo específico del psicoanalista, en la medida en que se diferencia de la urgencia médica, mediática, jurídica o cualquier otra.
En estos tipos de casos, se requieren respuestas efectivas, sin embargo, los tips no funcionan, el protocolo y el esquema farmacológico estipulado, revelan sus fallas. ¿Cómo abrir cierta pausa ante el empuje al acto? ¿Es posible hacer cesar algo del sufrimiento en favor de cierto alivio?
En la urgencia subjetiva[1]  se hace presente la falta en ser de un modo insoportable. El dolor de existir no encuentra sosiego, no ubica un significante que lo oriente. ¿Qué hace el psicoanalista en una crisis? La presencia del analista ¿cambiará las cosas? ¿La medicina de la palabra abrirá nuevos caminos?  ¿La lectura analítica logrará localizar un S1 que nombre algo del objeto a?
¡Los esperamos!
Cartel Inter-Secciones:
Silvana Facciuto, Gabriela Grinbaun, Elena Levy Yeyati, Silvia Puigpinóos, Carolina Rovere y Sabina Serniotti.
Camila Candioti (Más Uno)
[1] Lacan, J. (1966). Del sujeto por fin cuestionado, Escritos 1, Bs. As, Siglo XXI. 1988. pág. 226.